viernes, 22 de agosto de 2008

El abrazo


Cuerpo fino, brazos largos,

manos lindas, rostro humano,

todo lo que en conjunto,

me entregas en tu abrazo.


Ese único abrazo

que me das lento y calmado,

fuerte, suave, intenso,

lo siento, lo atrapo.


Después con tu mirada,

ya lejos sin contacto,

permanece allí, latente, presente,

aún no ha acabado,

cuando de repente,

es mi inconsciente,

quien te ha besado.


Mi piel sonrojada,

mis manos temblorosas,

y ya no sé que hacer,

el abrazo ha terminado.


Eso es lo que siento,

despierto en un momento,

el susurro del viento,

remese el pensamiento,

nada ha pasado,

yo no te he besado,

permaneces allí,

sigues a mi lado.


Eres mi amigo, eres secreto,

eres el ángel de mis ensueños.

Camila Galdames S.

lunes, 18 de agosto de 2008

Fusión por Amor


Dos velas iluminan,

mientras me desvistes,

tímido procuras,

con mirada profunda,

encontrar suave blancura,

de mi piel virgen e inmadura.


Es esta noche, la más oscura,

estrellada, sin luna alguna,

que nos abraza, que nos oculta,

que nos rodea,

cómplice muda.


El calor de tus manos,

adormece mis cabellos,

que por vez primera,

se encrespan de aquí hasta el cielo.


Es este nuestro encuentro,

reunidos cuerpo a cuerpo,

descubriendo un mundo entero,

un mundo mutuo,

en Dios perfecto.


Es fecundo, es completo,

rebalsando amor etéreo,

amor de nuestros besos,

nunca antes descubierto.


Amor de niños,

enriqueció el cariño,

amor de adultos,

alimentó caminos,

amor de amantes

enloquecidos,

nunca antes ambos vivimos,

es nuestro lazo,

amor primero,

velas se apagan,

inunda el sueño.

Camila Galdames S.

miércoles, 13 de agosto de 2008

El último viaje


Vi en tus humildes ojos,
el dolor de su partida,
a quién no volverías,
a encontrarte día a día.

Tu rostro joven,
de piel tersa y ojos resplandecientes,
llevan la sangre de aquel cuerpo,
que yace en paz, sereno, ausente.

La madre de tu madre,
dejó vacío en tu aire,
ya no está, y bien lo sabes,
es una herida penetrante.

Brotarán amplios tus sollozos,
amarga presión sobre tu pecho,
grandes llantos en tu lecho,
te librarán de este penar.

En tu alma celestial,
hay tiempo nuevo para avanzar,
la vida acaba para algunos,
y en ti recién comienza a andar.

Luego vendrán bellos recuerdos,
miles de cuentos que contar,
relatar las mil historias,
que junto a ella pudiste formar.

Camila Galdames S.

martes, 12 de agosto de 2008

La vida en un jardín



Entre rojo verde y blanco

una obrera destacada,

no se encuentra en un telar,

si en un valle natural,

viste tonos amarillos,

no escogió hoy su vestido,

aletea y aletea

¿trabajará para sus niños?

Diminuta, silenciosa,

en la fábrica de pétalos,

que despiertos por el sol,

la llaman, la esperan

¡ven pequeña solitaria!

fecunda nuestras almas,

vuelve vuelve cuando quieras,

esperaremos en calma.


Camila Galdames S.



domingo, 10 de agosto de 2008

La flor de mamá

Primavera de septiembre

mariposas traerás

agradables atardeceres

de hermosas flores llegarán.


Flores que cautivan

a los niños más pequeños

de manitos inquietas

y ternura perfecta.


En un reflejo de amor

o pensamiento primor

cortando un tímido tallo

a veces con un tirón

veremos a muchos niños

con alegría y fervor

correr a sus casitas

con gran desesperación

pues llevarán en sus manos

para la madre una flor.

Camila Galdames S.

viernes, 8 de agosto de 2008

El sueño de volar


Anoche soñé volando,

sin alas, sólo flotando,

y los niños me miraban,

fascinados me llamaban.


Ven niñita voladora,

enséñanos a volar,

gritaba el muchacho,

más grande del lugar,

te prestaré mi pelota,

cuando la quieras usar.


Yo era indiferente,

como ellos al jugar,

¡ay! la niña molestosa,

si juega ya va a llorar.


El fútbol es de los niños,

las bolitas ¿de quién va a ser?

juega, juega a las muñecas

y míranos no más correr.


Anoche soñé volando

y hoy me desperté

los niños hoy preguntan

si el arquero quiero ser.


Camila Galdames S.

jueves, 7 de agosto de 2008

Te extraño mar

Aquel rugido de tu voz fría en el invierno,

tratando de espantar las bajas y espesas nubes,

que envolviendo,

te esconden tras ellas,

las mismas que entorpecen el camino

De quienes te buscan a diario.


Oh mar, oh mar

si no fuera por aquellos recuerdos,

cierro los ojos, te siento aquí adentro,

cada verano me esperabas,

pero jamás como yo en este invierno

juegos de niña, baldes y tiestos,

hoy no te tengo, hoy no te tengo.


Escultor de rocas

moldeador de historias

borraste mis huellas,

¿dónde están ellas?

yo las dejé, te las regalé

y tú quieres más y yo quiero más

como no desear recorrer

descalza por las arenas blancas que rodean tus aguas

me siento invitada, las olas me llaman

y tu allá lejos te quiero, te quiero.

Camila Galdames S.

martes, 5 de agosto de 2008

Tarde en la Casa Campestre


Dulce canto de tus aguas

Adormecen mis sentidos

Calman el alma más agitada

Calman mi alma desesperada

A la distancia un sol imponente

Se hace presente en esta morada

Así como el silencio en atardecer

De la amplia casa deshabitada

Miro a través de estas ventanas

Paisajes inmóviles de verde fragancia

Y cual manchas blancas pintando el cielo

Nubes entrelazan un juego en silencio

Cierro mis ojos en un gran intento

Ese que quiero de escuchar el viento

Más es su ausencia la que me encuentro

Duerme en esta tarde de calor intenso.



Camila Galdames S.

lunes, 4 de agosto de 2008

Camino hacia él

Árboles desnudos,

sin vergüenza alguna,

acompañan mi camino,

bajo la luz de la luna.

Un viento frío,

estremecedor,

los ha desarropado,

en un otoño fresco,

en un invierno seco,

y con la misma furia,

hoy sacude mis cabellos.

Mientras camino, pienso en él,

quien me espera en mi destino,

más allá del viento,

más allá de la oscuridad,

quien bajo la misma luna,

piensa en mí como en ninguna.

Camila Galdames S.

domingo, 3 de agosto de 2008

Amanecer Cansada


Cuando la luz de la mañana
Recién penetra en mi ventana
Son mis ojos agotados quienes le imploran
Que se vaya.

Y mis huesos sienten frío
Me rehúso a despertar
Y en calles tanto ruido
Que parece un carnaval.

Y esa luz de la mañana
Que no se va, que no se va
Y ese ruido carnavalesco
Que ya más fuerte no va estar

Me susurra ya es de día
¡Vamos! ¡Vamos! a levantar
Que su suave faz bonita
No deje de ver el sol brillar.

Camila Galdames S.

viernes, 1 de agosto de 2008

La gaviota colonizadora

De quién más si no mío

pensó la gaviota,

Mirando a todos lados

si allí había otra,

posada en lo más alto

del bote amarillo,

creyose la dueña

del mar infinito,

el mar que hasta entonces

se hallaba dormido,

estalló de repente sin

previo aviso,

voló la gaviota

que bravo es mi amigo,

si sólo en un minuto

lo quise hacer mío.

Camila Galdames S.